índice

Conde de Villamediana

Determinarse y luego arrepentirse

Defiéndeme de este mal

Llegar, ver y entregarme ha sido junto

Podré ya, voluntario  desterrado

Qué galán que entró Vergel...

Bien sé que este amante rojo...

Determinarse y luego arrepentirse,
empezar a atrever y acobardarse,
arder el pecho y la palabra helarse,
desengañarse y luego persuadirse;
comenzar una cosa y advertirse,
querer decir su pena y no aclararse,
en medio del aliento desmayarse,
y entre el temor y el miedo consumirse;
en las resoluciones, detenerse,
hallada la ocasión, no aprovecharse,
y, perdida, de cólera encenderse,
y sin saber por qué desvanecerse:
efectos son de Amor, no hay que espantarse,
que todo del Amor puede creerse.

PULSA AQUÍ  PARA LEER CONCEPTOS Y TEORÍAS AMOROSAS DE DISTINTOS POETAS

ir al índice

Defiéndeme de este mal

lo que el mismo mal me niega,

pues es tal que al alma llega,

y en ella queda inmortal.

 Entiérrese mi querella

de su secreto vencida,

que no es bien que tenga vida

quien busca cómo perdella.

 En los peligros buscados

se pierden los prevenidos,

remedios siempre perdidos

es muerte de desdichados.

 Secreto yo te guardara

porque Amor manda guardarte,

si decirte y si callarte

la vida no me costara.

 Quien sólo supo vivir

en desdichas confirmado

podrá morir confesado,

y confesado, morir.

 Una verdad por castigo

pudiera decir, señora,

mas es ya muy tarde agora,

y habrá de morir conmigo.

ir al índice

Llegar, ver y entregarme ha sido junto,

la deuda general pagada os tengo,

y a ser de vos injustamente vengo

condenado sin culpa en sólo un punto.

 Padezco el mal, la causa no barrunto,

que yo, sin esperanza, me entretengo,

y sólo de adoraros me mantengo

vivo al servir, y al merecer difunto.

 Quien sabe tanto y claramente entiende

que esperar algo es yerro sin disculpa,

con la intención no puede haber errado.

 Miro y no hallo en mí de qué me enmiende;

mas si desdichas las tenéis por culpa,

¿cómo estará sin ella un desdichado?

ir al índice

Podré ya, voluntario desterrado

en esta felicísima ribera,

si no aplausos de Amor, lograr [siquiera]

ocio sin culpa, sueño sin cuidado.

Quizá será desdén solicitado

el conortado olvido que me espera,

y con alas de aviso, y no de cera,

seguro volaré, si no envidiado.

Mares contrarios ni contrarios vientos

poco afligen la entena que, varada,
se niega ya a las ondas inconstantes.
De[n] luz a quejas ciegos escarmientos;
deje la razón, muda de avisada,
este golfo a mejores navega.

ir al índice

¡Qué galán que entró Vergel
con cintillo de diamantes,
diamantes que fueron antes
de amantes de su mujer!

 

ir al índice

 

 

Bien sé que este amante rojo
es flojo,
su pica, taco y velorto,
corto,
y que no tiene esta pieza
cabeza:
no guerreará con destreza
instrumento tan mellado,
porque está, de puro usado,
flojo, corto y sin cabeza.

PULSA AQUÍ  PARA LEER POEMAS DEDICADOS AL SEXO DEL HOMBRE-MUJER

Y AQUÍ PARA LEER POEMAS SATÍRICOS-BURLESCOS

ir al índice

 

IR AL ÍNDICE GENERAL