Mi madre siempre deseó una parcela en el campo: "Descansar es invertir en calidad de vida". Para su último hogar improvisó un alquiler de cinco años y flores de plástico. La muerte también tiene fecha de caducidad. Ha vencido el alquiler y mi padre le ha comprado su propia parcela en el campo, en el pueblo. La muerte también entiende de clases. Vuelven a encontrarse, por arte del negocio inmobiliario. Su última cita, en el paraíso del cementerio municipal: mi padre asiste al siniestro desnudo de huesos desordenados. Y el anillo de matrimonio. Su esposa, mi madre, en una paz brutal como nunca tuvo. Todo en una bolsa de plástico. Sin más mística: el espanto en una bolsa de basura. Mi padre volvió a sentar a su amante en el asiento del copiloto. Con cariño. Con la tragedia instalada en el volante. Con arcadas. Con amor. Depositó la bolsa, como el que regresa del supermercado, en la propiedad, orgullo familiar, en una bolsa de basura de plástico de marca. Tantas bocas viven de la muerte. Hasta mi poema vive de la muerte. Mi ego liba de tu muerte. Perdóname, mamá, has tenido una nieta. |
Tengo tres hijos y una amiga que me ama distinto: mi amiga me ama despacio, sin daño, y provoca incendios que no destruyen. Tengo un gobierno de hormonas que contradicen sus órdenes y desean con A. Tengo el amor de mi amiga, dócil y generoso, y ya no quiero la violencia de los falos perforando mis órganos, ni la torpeza de sus manos rústicas. Tengo los brazos de mi amiga, delicados, adorando mis pechos. Tengo sus labios de hembra convulsionando mis labios de hembra. Tengo una linda fractura, lasciva y trabajadora, llorando permanentemente de placer, cuando mi amiga, mi ángel lésbico, se adentra en mis oscuridades y se queda explorando mi humanidad con H de Hembra. Tengo tres hijos y una amiga que me ama distinto: Tengo algunos problemas. |
Yo
sé que tú sabes
Estábamos borrachos,
En
aquel bar nos
Yo
sé que tú sabes
Yo
sé que tú sabes
Yo
sé que tú sabes PULSA AQUÍ PARA LEER POEMAS ERÓTICOS |
He
necesitado cumplir los veinticinco.
Ahora me faltan años
|
las matemáticas de C.O.U. ni la antropología de 3º de carrera. Para nada sirvió tanta Teoría del Conocimiento, ni el empacho de Filosofía del Lenguaje. No exigen en el currículum que se especifique. No aparece en el temario de oposiciones. No se recoge en ningún manual de técnicas de estudio o búsqueda de empleo. Y es más importante que saber más de tres idiomas. Una simple regla de tres: el número de triunfos y virtudes es directamente proporcional al tamaño de tus tetas. |