BALADA XIII
Mi casa no
tiene puerta,
mi puerta no tiene casa;
_pero yo a todas las horas
entro y salgo con mi amada.
Mi lecho
no tiene alcoba,
mi alcoba no tiene lecho;
_pero nosotros en ella
perfectamente cabemos.
Soñamos
y no dormimos,
dormimos y no soñamos,
_pero soñando, o durmiendo,
siempre estamos abrazados.
No hay
noches en nuestros días,
en nuestros días no hay noches;
_pero nuestro amor sin alas
en alas del tiempo corre.